La Sonrisa Telefónica

09.10.2018

Existe, es perceptible y muy útil si realmente queremos conseguir una comunicación fluida y recíproca con nuestro interlocutor.


Aunque en una llamada tradicional no veamos a quien se encuentra al otro lado, si hay elementos que se transmiten durante la conversación, con o sin palabras, que aportan información adicional a ambos interlocutores

La sonrisa telefónica es uno de ellos. Consiste simplemente en "esa pequeña carcajada", que con un tono dulce, y positivo es esbozada por parte de alguno de los interlocutores.

Escuchar esta sonrisa es tanto o más potente que verla. Ya que nuestro cerebro, como si de neuronas espejo se tratara tenderá a imitarla, a reproducirla más adelante en la conversación y esto incrementará el nivel de comodidad de los interlocutores, así como su interés en la llamada.

En el fondo si alguien nos sonríe telefónicamente percibimos un estado de ánimo activo, amistoso, transmitiendo simpatía y amabilidad, y en el fondo prepara la comunicación para que se desarrolle en un entorno mucho menos agresivo que el de dos desconocidos al teléfono.

En el momento de la presentación la sonrisa telefónica aporta un clima de apertura a la conversación, durante la conversación esbozarla ayuda a indicar a la otra parte que seguimos presente, le estamos prestando atención y confirmamos con ello la recepción de su mensaje y durante el cierre ayuda a dejar un buen recuerdo (impresión positiva) de la llamada.

La sonrisa telefónica no debe ser exagerada, ni excesivamente fingida, ni mucho menos abusar de ella, ya que igual que somos capaces de detectar lo positivo, estos elementos "de exceso" son igualmente percibidos, generando en el individuo un estado de desconfianza hacia su interlocutor (efecto contrario al buscado).

Por ello ni mucho, ni poco, en su justa medida. Y ahí se encuentra su dificultad, en utilizarla lo necesario, y en los momentos adecuados para que la comunicación telefónica fluya hacia el objetivo perseguido (la colaboración del cliente para el desarrollo de una encuesta, convencerlo para que pruebe o adquiera un producto, etc.).

Ser un buen profesional es saber manejar de forma correcta este tipo de elementos durante la conversación. Si quiere dejar la comunicación con sus clientes en manos experimentadas, en Asortis estamos para ayudarle.